Cosas que nos encantaba hacer cuando íbamos a EGB
Hoy toca hablar de las cosas que nos gustaba hacer o que nos pasasen. Y es que, aunque parezca lo contrario, la vida de estudiante era muy dura, aunque a veces teníamos nuestras recompensas. Pequeñas cosas, quizás sin importancia, pero que hacían que los días fuesen más llevaderos. Hoy queremos fijarnos en aquellas pequeñas cosas que nos encantaba hacer y que, es posible, tú también hacías. ¿Las recuerdas? ¿Qué cosas te encantaba hacer cuando ibas a EGB?
Salir corriendo al recreo cuando sonaba la sirena.
Dejar que se derritiera el flash para beberlo de un trago.
Al grabar una peli programar un poco más de tiempo en el vídeo para que se grabase la peli erótica de después.
Estrenar zapatillas de marca un día de clase.
Ver Barrio Sésamo con un bocadillo de chocolate en las manos.
Salir de la tienda de chucherías con un montón de cosas y con más de cien pesetas en el bolsillo.
Abrir regalos, ya sea en reyes o en cumpleaños.
Jugar al escondite y que nunca te toque quedártela.
Que alguien te diga (o leas en una nota) que a la persona que te gusta también le gustas.
En los recreativos pasarte las pantallas que nadie se pasa y poner tus iniciales en primera posición.
También puedes ver:
Se te nota que tienes por lo menos treinta porque…
Cosas que haces que delatan que fuiste a EGB
Cosas que haces que delatan que fuiste a EGB, parte 2
Manual del perfecto niño/a de EGB
Manual del perfecto niño/a de EGB, parte 2
Manual del perfecto niño/a de EGB, parte 3
Cosas que hacían o decían nuestros mayores y que repetimos ahora (por si acaso)
¿Cuántas veces has hecho…?
Lo que nos ponían las madres cuando hacía frío
Lo que nos daba miedo en EGB
Lo que merendábamos en los 70 y 80
Lo que daban de sí 100 pesetas
Comentarios (35)
salir a la calle después de merendar a jugar a las canicas o al beisbol con una raqueta de tenis
Madre mía, la foto del escaparate de Caramelos Paco me ha llegado al alma. Cómo hecho de menos los adoquines de caramelo; no te los podías comer de una sola vez XDDDDD
En mi barrio se decía “ligártela” cuando te tocaba contar al escondite.
Nosotros decíamos “mogarla” ” tu la mogas!!”
Llamar a los timbres de las casas y echar a correr
Hacer fogatas con las cerillas q tenian el palito de papel
Jugar a las 5 piedrecitas (las niñas)
Jugar al elastico
Robar chuches en los almacenes Woolworth :)
– Descubrir que tenías todo el fin de semana libre después de hacer los deberes el viernes.
– El inicio de la música de “El Coche Fantástico”.
-Cuando finalizaba la retransmisión de los toros y por fin empezaba la programación infantil.
-El olor del asfalto mojado (aunque fuera sinónimo de que se había acabado el partido con los amigos).
Quedarnos a jugar en el patio de la escuela a la salida, a las 5 de la tarde.
Leer los Superhumor y los Asterix y Lucki Luke.
Explorar los alrededores, primero de tu barrio, luego de la ciudad. Investigar en las casas abandonadas en el campo
Hacer esas excursiones y exploraciones en días de nieve o niebla.
Formar tu banda y tener un cuartel general en alguna casa de esas.
Los sábados por la mañana, especialmente los de primavera.
Los días de verano: primero ibas a por la leche y el pan, repasabas un poco los deberes o hacías el cuaderno de verano y luego, todo el santo día para jugar.
Jugar al marro o a la cadeneta con las chicas y poder liberarlas y ser su héroe.
Desmontar aparatos de radio casettes o cualquier cosa, aunque luego no supiera montarlos.
¡Cualquier cosa era emocionante en los tiempos de la EGB.!
Marcar un gol en el recreo o en clase de gimnasia.
Ver el club Disney los Viernes por la tarde (primero) y después los Sábados por la tarde (después). Hablo del 92, y yo es que soy de la generación del 84. Ainsss, qué tiempos.
Lo de poner el vídeo a grabar tiempo de más (y un poco de menos) yo lo hacía porque las cadenas nunca eran puntuales en los horarios que indicaban y era para que no me quedara la peli a medias, no para la porno xD
Luego, si había grabado mucho trozo después, grababa otra peli encima justo donde acababa la primera.
Levantarte el fin de semana temprano para ver la carta de ajuste, y luego La Bola de Cristal o Cajón Desastre, ver los domingos por la noche El tiempo es Oro. Desear que a tu madre no le quedara pan para que te comprara unos Donuts, Tigretón o Mi merienda de camino al cole. Cambiar cromos del Toy en el recreo. Comprar clickes Cheiw para las calcomanías y luego tu madre te bañara rascándote con estropajo verde…
Jajaja y acababas con las rodillas cuello y codos escocios de tanto frotar!!!
¡Qué buena! En esa tienda he estado yo, y la saqué también una foto. Lo que no me acuerdo es dónde está. Creo que Valencia, ¿puede ser?
“Caramelos Paco” en Madrid. La que dices de Valencia apuesto a que es “La casa de los caramelos”, al lado de la Estación del Norte.
En caramelos paco comprábamos siempre los caramelos cuando era mi cumple y me tocaba repartirlos en el cole a los compis. Era una tradición jajaja como nos poníamos :)
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Soy del 80…Uff tantas cosas…. Ir a la fabrica gusanitos y llevarnos un saco( no un paquete) de gusanitos rojos de 5 duros!!! Y después a las plantaciones de caña de azúcar ( la fabrica de azucarera estaba cerca…) y arrancar las cañas y comernoslas en la plaza…
Jugar al poli ladro…
Tantas cosas que mi hijo no hará…. Y cuando se las cuente ni se lo creerá… O pensara como es que sigo vivo.. Jajaja
Cuándo alguien estrenaba zapatos, se le pisaba y decir: “ya están estrenados”
Comprar pepinillos de cinco duros los viernes. De lunes a jueves tocaba los de duro, pero los viernes era la envidia de todos.
Señoras y señores, caramelos Paco está en la c/ Toledo, Madrid, muy cerca del La Latina. Precisamente esta mañana he pasado por allí, camino del Rastro. Ahora es una tienda delante de la cual se queda loco mi peque – no ha cambiado nada – :)
caramelos paco!! donde mi padre me compran jamones y chorizos de caramelo!! ahora cuando paso, siempre compruebo que siguen vendiendolos
– Hacer cabañas/refugios en los árboles (con cantidades ingentes de clavos)
– Hacer todo tipo de armas tipo ballestas o arcos y utilizar como flechas varillas de paragüas (y que nunca nadie resultase herido…)
– Los domingos, juntar con los amigos para comprar pastas Reglero, una tableta de chocolate y una botella de vino blanco Corales (y terminar un poco piripi)
– Tirarse rodando por un prado empinado (y terminar con un mareo terrible)
P.D. Yo es que soy de pueblo.
Te comprendo, yo tambien soy de pueblo y tambien he hecho todas esas cosas y ademas “pelearnos” con los chicos del pueblo vecino todos los dias a las 17:30 nada mas salir del cole y a tirarnos piedras naranjas de una orilla del rio a la otra asi casi todos los dias siempre se iba alguno con una brecha en la cabeza y los demas les cogia mas rabia incluso haciendo incrusioners en el terreno rival para vengar al compañero herido.
Hacer figuras diversas( monigotes, aviones…) con los plásticos de los flases q nos encontrábamos, golpeándolos uno encima de otro con una piedra que tuviera pico…
Hacer una cometa con una bolsa de basura y 2 cañas finas..
“Rescatar ” gatitos y resguardarlos en una cabaña de cartón y palos..
De estrenar zapatillas nuevas en clase nada!!!que si ibas en día de clase con zapatillas nuevas todos te daban un pisotón con todas sus fuerzas y gritaban…Estrenoooooo!!!
Cuando hacíamos record en la recreativa muchos poníamos nuestra primera inicial, luego una “y”, y luego la primera inicial de quien nos gustaba. Yo estuve un tiempo poniendo JYM ¿y vosotr@s?
Leer Zipi y Zape mientras desayunaba mi Cola Cao con muuuuchas galletas Maria,ñam ñam!
Ponernos lo más adelante posible en la fila para entrar a clase, por el simple hecho de estar delante. A veces unos colándose y otros defendiendo su sitio. Y ahora que lo pienso… ¿pa qué? si íbamos a entrar igual.
Yo tenía claro cuándo me comprarían la palmera de chocolate ( mi favorita), el donuts o el croissant… ese día tocaba seguro… después de hacerme análisis de sangre, porque iba sin desayunar, y a continuación al cole. Mi momento bueno después de un ratito malo.
Y por supuesto de normal…. paraba el autobús delante de casa, por lo que la gente cuando bajaba tiraba los tickets. Eran de un cartoncito especial, no eran ni muy blandos ni muy duros, y según el tipo de viaje los había blancos, rosa, verdes, azules y amarillos. Los recogíamos y hacíamos figuritas con ellos… camas, armarios… todo en pequeñito y jugaba a las casitas…
Nunca llegué a experimentar la penúltima :(
En mi barrio había un puesto de chuches que se llamaba Baldomero era un sitio pequeño, muy pequeño y fue un caso de expediente X, porque no se de que forma tenia tantas cosas alli metidas, eso era verlo para creerlo.
Pues en mi barrio, en Mataró (Barcelona) había lo que llamábamos “La bodeguilla” que no tenía ni letrero ni nada y vendía vino, licores, agua y …… chuches. de pequeños comprábamos las chuches y cuando nos hicimos más mayores las litronas de después del partidillo de fútbol sala en el polideportivo de al lado.
– Ir los viernes por la tarde al videoclub a alquilar una película en vhs y rezar para que la misma no estuviera ya alquilada.
– Gritar ¡¡CORTO FUGA!! y salvar a tus compañeros.
– Jugar al 1×2 en el recrero con la bola de papel albal.
– Terminar los deberes el viernes por la tarde o sábado por la mañana y jugar a la Master System con el Sonic o el Alex Kidd.
– Los cromos de la Liga de ediciones Este.
– Ver las tortugas ninja a medio día los fines de semana en telemadrid o la serie de Batman en Canal plus por las tardes después de hacer los deberes.
– Aguantar el sábado hasta las tantas de la madrugada viendo el Juego de la Oca.
Y me dejo muuuchas más
Llamar a los telefonillos y salir corriendo
Que me gustara una chica y, por vergüenza, ni saludarla